El presunto depredador sexual de Llíria, un hombre de 69 años detenido a comienzos de mayo tras presentarse en el cuartel de Llíria y confesar décadas de abusos y violaciones a menores de su entorno más próximo, será puesto en libertad con cargos tras estimarse el recurso de su defensa. La Audiencia Provincial de Valencia revocó la prisión provisional al entender que existen medidas menos gravosas y que no se acreditó un riesgo claro de fuga ni de destrucción de pruebas.
El Juzgado de Instrucción número cinco de Llíria, que investiga a M. H. C. por agresiones sexuales continuadas contra al menos siete víctimas que ya han denunciado, entre ellas la nieta, la hermana y una cuñada, así como una niña de ocho años, tomó esta mañana declaración en calidad de investigada a la pareja de la presunta pederasta y madre de una de las víctimas. La acusación sostiene que ella habría permitido, presuntamente, los abusos y las agresiones. La defensa cuestiona la versión de la acusación y sostiene que no tenía conocimiento de los hechos.
Una de las letradas de la acusación señaló incoherencias y contradicciones con las declaraciones que dio públicamente tras la detención, en las que llegó a expresar que debían aprender a perdonar. El juez decidió dejar a la investigada en libertad sin medidas cautelares, pero la mantiene inmersa en el proceso por un presunto delito de encubrimiento a la espera de una calificación definitiva del delito objeto de investigación.
Riesgo de reiteración delictiva
Con respecto al presunto autor de las agresiones, la Audiencia Provincial ha dictado su puesta en libertad con la obligación de presentarse ante el juzgado dos veces al mes para firmar. La defensa sostuvo que la prisión provisional resultaba desproporcionada y que se podían aplicar medidas menos gravosas. Sin embargo, el auto no consideró aún dos denuncias nuevas que se agregaron a la causa, lo que evidencia un evidente riesgo de reiteración de hechos. Estas dos nuevas denuncias, atribuidas a agresiones sexuales sin violencia contra otros dos menores, elevan el total de víctimas a siete, quedando dos casos prescritos y no imputables.
El Juzgado de Instrucción número cinco confirmó la prisión provisional, comunicada y sin fianza de M. H. C. a falta de una revisión por el Juzgado número siete de Llíria. En aquel auto se valoró expresamente el riesgo de fuga para evitar que el acusado eluda la acción de la justicia, y se apuntó como medida para evitar reiteraciones futuras. Las dos denuncias recientes se incorporaron a la causa y describen hechos contra otros menores de edad, uno de ellos un niño de cinco años y otro de catorce, todos vinculados al círculo de amistades del sospechoso.
Pendientes de fecha para la cámara Gesell
Estas dos nuevas víctimas se suman a las cinco ya reportadas, todas pertenecientes al entorno del presunto pederasta. Entre las víctimas figura la nieta con diversidad funcional, su hermana, su cuñada, una amiga de la nieta y una niña de ocho años, hija de unos amigos y a quien se atribuyeron abusos en un camping de la provincia de Valencia. El medio no revela su identidad para garantizar su anonimato. Los padres de la menor han solicitado que se agilicen los trámites para tomar declaración a su hija mediante cámara Gesell a la mayor brevedad posible, ya que la realización de esta prueba es necesaria para derivarla a los servicios de atención psicológica para menores víctimas de abusos. En palabras de la madre, la hija necesita tratamiento especializado cuanto antes porque atraviesa un periodo de gran malestar desde que se relató lo ocurrido.