De crítico acérrimo de Trump a defensor del bastión republicano más preciado, el senador Ted Cruz fue reelegido este martes tras superar una contienda sorprendentemente intensa con su rival demócrata, Colin Allred, que buscó desafiar el status quo que mantiene Texas rojo desde hace 30 años.
Cruz logró aferrarse a su escaño en el Senado, que ha conservado desde 2013, según las proyecciones de los principales medios de Estados Unidos. Este senador, conocido por su boicot a la Ley de Cuidado Asequible impulsada por el presidente Barack Obama, fue candidato presidencial en las elecciones que siguieron a la marcha de su rival demócrata en 2016, enfrentándose a Donald Trump. El perfil de Cruz como un ultraconservador religioso lo situó como un candidato más tradicional para el Partido Republicano, y fue uno de los rivales más agresivos contra Trump en las primarias. Aunque desde entonces se ha alineado con el ex presidente, brindándole su apoyo a principios de 2024 antes de unas primarias republicanas que Trump terminó ganando por la mínima. Fuente: AP
Bastión republicano desde 1994, los demócratas trataron de ampliar su terreno mediante cambios demográficos e invirtieron millones para impulsar a su candidato. Allred, exfutbolista, tuvo éxito en su carrera en el Congreso en 2018, lo que lo convirtió en un rival creíble que centró su campaña en el aborto. La ventaja de Cruz sobre Allred supera los 900.000 votos, cifra mayor que la obtenida en 2018 cuando enfrentó al demócrata Beto O’Rourke. La derrota de Allred representa un golpe para el Partido Demócrata en una de las contiendas legislativas más costosas de este año, con gastos superiores a los 140 millones de dólares entre ambos candidatos. Fuente: AP
Bastión republicano
Los puntos fuertes de Cruz en esta contienda reflejaron el discurso antiinmigración defendido a nivel nacional por Trump, pidiendo mano dura en la frontera con México. Cruz enfatizó el apoyo de votantes latinoamericanos y habló de una noche con resultados increíbles que hacen temblar a los demócratas. Fuente: AP
El gobernador de Texas, el republicano Greg Abbott, felicitó a Cruz, asegurando que su victoria representa la defensa de los valores tejanos de libertad y prosperidad. Con la candidatura de Allred, los demócratas apostaron a demostrar que el Partido Republicano estaba perdiendo su influencia política en Texas, donde mantienen el control de la legislatura y el Gobierno estatal desde 2018. Fuente: AP
Los candidatos republicanos a la Presidencia han ganado Texas en todas las elecciones desde 1976 y este año, Trump continuó con la tradición, haciéndose con los 40 votos del colegio electoral y un 56,4 % de los votos. Fuente: AP
Los demócratas se juegan en estas elecciones el control del Senado, ya que se renuevan 34 de los 100 escaños de esa cámara y cualquier pérdida haría tambalear la actual mayoría simple. Fuente: AP
Analistas señalan que la contienda en Texas subraya la importancia de la financiación en elecciones de alto costo y la persistente fortaleza de la coalición republicana, que combina estructuras tradicionales con una base conservadora en áreas rurales y en comunidades que valoran la seguridad y la economía. Esta realidad convierte a Texas en un barómetro clave para la próxima etapa política del país. Fuente: AP
En resumen, la victoria de Cruz mantiene intacta una línea conservadora dominante en Texas y envía señales sobre el equilibrio de poder en el Senado, con implicaciones para las políticas nacionales y la estrategia electoral de cada partido. Fuente: AP