Una discusión aparentemente menor entre dos menores sobre el corte de pelo de uno de ellos casi terminó en tragedia ayer cuando el padre de uno de los niños intentó disparar contra el padre del otro frente a un chalet situado en Domeño. Aun cuando uno de los individuos implicados resultó herido, el tiroteo dejó al menos a dos familias en estado de shock y a los vecinos preocupados por la seguridad en la zona. El hombre que recibió el disparo logró esquivarlo y, milagrosamente, salió ileso gracias a su quick movimiento para ponerse a resguardo. Previa a estos hechos, la autoridades de la Policía Local de Llíria habían detenido a la otra parte por una agresión ocurrida días antes, durante la cual el detenido empuñó un arma blanca en plena vía pública. Con todo, la investigación continúa para esclarecer los vínculos entre los incidentes y las posibles responsabilidades de cada interesado.
El suceso tuvo lugar alrededor de las 13:30 de ayer en una zona de viviendas diseminadas de Domeño. Según los testimonios recabados y los indicios recogidos en el lugar, un hombre armado con una escopeta habría efectuado hasta cuatro disparos contra su rival, quien logró evitar la muerte y se refugió de inmediato en su domicilio. Este tipo de acciones demuestra la gravedad de la situación y la necesidad de una respuesta rápida por parte de las fuerzas de seguridad para evitar que la violencia escale en una comunidad que suele caracterizarse por su tranquilidad.
La Guardia Civil se mantiene a la espera de esclarecer si el origen del presunto intento de asesinato está vinculado con un episodio de convivencia irregular entre familias de la localidad. Las autoridades señalan que una discusión que empezó como una broma en torno a un corte de pelo, desencadenó tensiones entre las madres de los menores y, poco después, derivó en un enfrentamiento más serio. En estos momentos, los investigadores analizan las posibles motivaciones y el contexto que condujo a tal estremecimiento en una jornada que debía transcurrir con normalidad para los residentes.
La escalada terminó cuando, el día anterior, ambas familias se volvieron a cruzar cerca de un supermercado de Llíria. De los insultos y las amenazas se pasó a los golpes, y los progenitores se enzarzaron en una pelea que dejó secuelas. En un momento dado, uno de los hombres empuñó una navaja e intentó intimidar a sus oponentes. Este incidente provocó la intervención de la Policía Local de Llíria, que detuvo al portador del arma blanca y citó para entrevista de investigación al otro hombre, quien resultó lesionado en el enfrentamiento, aunque no llegó a presentarse ante las autoridades.
En las horas siguientes, fuentes cercanas a la investigación indicaron que, tras quedar en libertad por las amenazas con arma blanca, el hombre involucrado regresó a su domicilio en Domeño. Mientras se preparaba para entrar, observó la presencia de un vehículo sospechoso en la vía. En cuestión de segundos, una persona descendió del automóvil y le dio oportunidad al agresor para eludir los disparos con la escopeta. Este hecho subraya la tensión que rodea el caso y la gravedad de la amenaza, ya que el agresor huyó del lugar en el mismo vehículo.
Los agentes de la Guardia Civil se trasladaron a Domeño para entrevistar a la persona que habría sido el objetivo de los disparos. Afortunadamente, el afectado salió ileso, sin daños aparentes. Por ahora no se han producido detenciones adicionales, pero la investigación continúa para esclarecer las circunstancias exactas de los hechos, las posibles responsabilidades de cada uno de los implicados y los patrones de conducta que dieron lugar a esta secuencia de violencia. Las autoridades piden a la población paciencia y colaboración para aportar cualquier dato relevante que pueda ayudar a aclarar lo ocurrido y garantizar la seguridad en la localidad de Domeño.