Nuevo impulso en el mercado de la ropa de segunda mano coincide con una marcada conciencia medioambiental y un entorno inflacionario. Humana Fundación Pueblo para Pueblo cierra 2023 con récords de clientes, ventas y ingresos gracias a su actividad. Según un comunicado difundido a mediados de diciembre, la cadena catalana de tiendas de moda previamente usada ha atendido a 1,2 millones de clientes durante el año pasado, un 10% más que en 2022; ha gestionado alrededor de 3 millones de prendas, un volumen adicional del 13% frente al ejercicio anterior; y, de acuerdo con el medio especializado Modaes, ha logrado ingresos de 28 millones de euros, lo que representa un crecimiento del 19% frente al año previo.
Este registro subraya el auge del sector de la moda reutilizada y señala factores de crecimiento como la mayor demanda, la consolidación de valores positivos impulsados por una mayor conciencia ambiental, el redescubrimiento de nuevas experiencias de compra y la atracción de precios asequibles, todo ello en un entorno de inflación sostenida, señala la cadena, que se presenta como el primer operador de tiendas de moda de segunda mano en Cataluña con 22 establecimientos en la comunidad (51 en España en conjunto).
Los responsables destacan que los resultados de 2023 evidencian la confianza en un modelo de gestión centrado en mejorar la experiencia de compra, una oferta amplia de moda de segunda mano en continua rotación y el talento de los equipos que gestionan el textil. Rafael Mas, director de proyectos y relaciones externas de Humana, recalca que ese crecimiento se apoya en principios que conectan con las nuevas dinámicas del consumo, incluida la valoración de la moda reutilizada como opción atractiva y responsable.
La dirección de Humana sitúa el origen del crecimiento del sector en 2015, un avance que estuvo en pausa durante el confinamiento y el cierre temporal de comercios en 2020, para luego recuperar impulso de forma notable a partir del año siguiente. A juicio de la empresa, 2023 ha sido el año con mayor aceleración y consolidación del modelo, según consta en su comunicado de prensa.
Cambio de mentalidad y nuevas generaciones
El contexto macroeconómico, marcado por una inflación que se mantiene elevada y por un aumento sostenido de precios en gran parte de productos y servicios, parece haber sido un elemento clave. No obstante, Humana subraya un cambio de mentalidad más fuerte, el interés de las generaciones emergentes y la creciente preocupación por el medio ambiente como motores de fondo. La ropa de segunda mano se posiciona cada vez más como la primera opción para un número creciente de consumidores, lo que se interpreta como una señal de que la moda reutilizada ya no se asocia a estigmas sino a sostenibilidad y prestigio.
La dirección de Humana también celebra que Catalunya esté adoptando un consumo consciente similar al observado en otros países europeos como Inglaterra o Alemania, donde la moda de segunda mano es percibida como una alternativa sostenible de alto valor. La responsable visión de Mas apunta a que la tendencia va más allá de una moda pasajera y se consolida como una práctica responsable entre quienes buscan estilo con menor impacto ambiental.
La empresa subraya que las generaciones más jóvenes, especialmente la generación Z, muestran un compromiso claro: valoran la moda original y sostenible, a la vez que manejan presupuestos más ajustados. Esta combinación eleva la demanda y refuerza la idea de que la compra responsable puede coexistir con un acceso razonable a prendas de calidad.