El 92% de los trabajadores con contrato fijo discontinuo activos durante la mayor parte del cuarto trimestre de 2023, mientras que el 8% restante estuvo inactivo. En ese periodo, 651.500 trabajadores con contrato fijo discontinuo estuvieron empleados, de los cuales 55.300 quedaron en la reserva a la espera de llamamiento por parte de las empresas. Estos datos los ha hecho públicos la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo en una sesión del Senado, ante preguntas de la bancada del Partido Popular. Los datos se citan como provenientes del Instituto Nacional de Estadística (INE).
La figura del fijo discontinuo es una de las fórmulas contractuales promovidas por la reciente reforma laboral para sustituir, en parte, los contratos temporales. Este tipo de contratos implica un compromiso indefinido pero intermitente entre un trabajador y la empresa. El empleado permanece activo, como un trabajador indefinido, durante los periodos en que la empresa tiene actividad y lo necesita. Cuando esa actividad cae, el fijo discontinuo queda dado de baja ante la Seguridad Social, pero mantiene un vínculo contractual con la empresa.
Durante la inactividad, el trabajador no recibe salario de la empresa, puede solicitar la prestación por desempleo si cumple con los requisitos de cotización, y la empresa está obligada a volver a llamarlo cuando surja nuevamente la necesidad de más personal. El llamamiento del trabajador tiene prioridad sobre la contratación de personal temporal; si la empresa decide no volver a llamar, debe despedir al trabajador y pagarle una indemnización.
Antes de la aprobación de la reforma laboral, esta figura era poco común y se limitaba a ciertos negocios estacionales como la hostelería. En los dos últimos años ha ido aumentando su presencia y el Partido Popular ha acusado al gobierno de coalición de manipular los datos del desempleo para ocultar el impacto real de esta figura. Según los populares, existiría un grupo de fijos discontinuos que permanecen mes a mes en un limbo estadístico, ya que no figuran en la estadística de afiliados a la Seguridad Social ni en la de personas en paro registradas, ya que no buscan otro empleo sino esperar la llamada de su empresa para la temporada.
Este martes, el Partido Popular solicitó que la vicepresidenta informara sobre los datos de fijos discontinuos, algo a lo que el Ministerio de Trabajo ha respondido que depurar una cifra exacta es complejo. Según ese argumento, los servicios de empleo regionales recogen los datos de parados registrados con metodologías distintas, lo que dificulta la unificación de criterios y la entrega de una cifra depurada de cuántos fijos discontinuos acuden cada mes a solicitar la prestación de paro porque su empresa les ha dado de baja.
La ministra de Trabajo reiteró este planteamiento y citó datos del INE basados en la Encuesta de Población Activa (EPA) para el cuarto trimestre de 2023. Según Díaz, estos datos tienen validez ya que siguen la metodología del INE y se alinean con las homologaciones de las estadísticas de otros países de la Unión Europea.
En el cuarto trimestre de 2023, había un total de 651.500 personas empleadas bajo contrato fijo discontinuo, lo que representa un 3% de los 18 millones de asalariados activos. De ese total, 55.300 estaban en periodo de inactividad, equivalente al 8%.
Los datos citados por el INE difieren de los aportados mensualmente por la Seguridad Social, ya que provienen de dos fuentes estadísticas distintas: una es una encuesta y la otra un registro. Según la Seguridad Social, durante el cuarto trimestre de 2023 había 936.891 fijos discontinuos dados de alta, sin contar a los inactivos.
La respuesta de Díaz, citando a su vez los datos del INE, difiere de la información que el Ministerio de Trabajo había dado por escrito a una pregunta del PP meses atrás. Los conservadores han sostenido durante meses la idea de un posible sesgo en los datos. En diciembre de 2022, el Ministerio afirmó que había 1,23 millones de trabajadores con contrato fijo discontinuo en vigor, de los cuales 443.078 estaban sin actividad ese mes, lo que constituía una proporción del 36%, significativamente superior al 8% más reciente.