Community pensioners increase their income by 234 euros due to inflation

Los jubilados de la Comunidad Valenciana han visto cómo sus ingresos aumentaban en un 21 % -en concreto, 234 euros de media- durante los tres años, aproximadamente, en que se ha desarrollado la crisis de precios. Según datos del Instituto Nacional de la Seguridad Social, en agosto de 2021 los 630.100 residentes en la autonomía que tenían esta prestación cobraban de media 1.091 euros, mientras que en este mismo mes de 2024 los 665.491 beneficiarios percibían 1.325 euros.

Como consecuencia de la ruptura de las cadenas de suministro internacionales provocada por la pandemia del covid iniciada a mediados de marzo de 2020 a nivel global, los precios empezaron a subir de forma clara en el tramo final de 2021. Fue una tendencia que se agravó de manera ostensible a partir de febrero de 2022, cuando Rusia invadió Ucrania, lo que provocó un alza de costes en los mercados energéticos y de la alimentación que disparó la inflación en España y los demás países desarrollados. Los precios escalaron hasta alcanzar los dos dígitos. Tan es así que el Gobierno aprobó aquel año una subida de las pensiones para 2023 del 8,5% con el propósito de que el mencionado colectivo no perdiera poder adquisitivo.

Moderación

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Con el transcurso de los meses, la inflación ha ido moderándose, hasta el punto de que el mes pasado estaba en España en el 2,8 %. No obstante, el Índice de Precios al Consumo (IPC) se ha incrementado en un 16 % desde agosto de 2021, según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), lo que implica que los jubilados de la Comunidad Valenciana han ganado cinco puntos de poder adquisitivo durante este período.

Pero hay más, porque este aumento está a años luz del que han conseguido los trabajadores de la Comunidad. Y es que el salario medio bruto anual de los empleados de la autonomía ha pasado de los 1.852 euros de media del segundo trimestre de 2021 a los 1.944 del primer trimestre de 2024. Dicho de otra manera, se trata de una subida de 92 euros. En términos porcentuales, un 4,9 % más. Así las cosas, los jubilados han ingresado 126 euros más que los trabajadores una vez hecho el balance de estos tres últimos años de alta inflación.

Media nacional

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A pesar del incremento experimentado en ese período, lo cierto es que las pensiones de jubilación en la Comunidad Valenciana siguen lejos de lo que cobra de media el conjunto de los españoles -1.444 euros o, lo que es lo mismo, 119 euros más- pero también de lo que perciben los residentes en otras autonomías. El caso más significativo es el del País Vasco, donde sus jubilados cobran 1.765 euros y, por tanto, 440 euros más que los valencianos. Los asturianos (1.714 euros) y los madrileños (1.663) siguen a los vascos, mientras que la última posición corresponde a los extremeños (1.213). En el último año, el importe de la pensión en la Comunidad Valenciana se ha incrementado en un 5,18 %, mientras que el número de pensionistas lo ha hecho en un 1,51 %.

Si se suman a las de jubilación las prestaciones de incapacidad permanente, viudedad, orfandad y a favor de familiares, el número de pensiones en la Comunidad Valenciana asciende a 1.047.964 y el importe medio de las mismas se sitúa en 1.159 euros. No obstante, la cifra de pensionistas -computando únicamente la pensión principal en el caso de quienes son titulares de varias de estas prestaciones- se queda en 944.832 beneficiarios, de los cuales una ligera mayoría -468.514- son mujeres.

El retraso de la jubilación aumenta el riesgo de mortalidad

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Joan Batalla

Retrasar la edad de jubilación aumenta el riesgo de una mortalidad temprana, de forma que demorar un año la salida del mercado laboral eleva «significativamente» el riesgo de morir entre los 60 y los 69 años, especialmente en los sectores y ocupaciones físicamente más exigentes y sujetas a un mayor nivel de estrés emocional y mental. Así lo revela un estudio publicado este miércoles por la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea), en el que se afirma que este riesgo de mortalidad temprana es «mucho menor» entre aquellos trabajadores que tienen acceso a mecanismos de jubilación parcial que les permiten reducir sus horas de trabajo a partir de determinada edad, según informa Europa Press.

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Esos autores del estudio calculan el coste o beneficio social de restringir o eliminar la opción de la jubilación anticipada y muestran que «el impacto adverso sobre la esperanza de vida supera las ganancias fiscales». Utilizando el valor de un año de vida ajustado por calidad a los 60 años en España, el estudio señala que un aumento de 0,46 años en la edad al morir se traduce en una pérdida social valorable en 8.564 euros por cada individuo.

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