Simone Biles, Rocío López ‘RoRo’, Clara y Kamala Harris tienen algo en común. Mujeres criticadas por personas de todos los sexos por ser como son y cuestionadas por estar donde están. ¿Si fueran hombres recibirían las mismas críticas? No sé.
Simone Biles se retiró de la final de Tokio por salud mental. Argumentó que había perdido la confianza, que debía proteger su mente y su cuerpo y no sólo salir a una pista a hacer lo que todos esperaban que hiciera. Fue en 2021. Se ha recuperado, se ha casado, ha vuelto a unos Juegos Olímpicos y ha ganado. Una jefa. Para celebrar uno de sus logros posó junto a su marido, el jugador de fútbol americano, Jonathan Owens, y le cedió una medalla de oro para la instantánea. Y las hienas ya han hecho acto de presencia reprendiéndole por apropiarse de los logros de su mujer. Hay que ser ruin y tener mucho tiempo libre para opinar sobre la forma en que dos adultos que se quieren celebran una buena noticia. Biles les ha llamado miserables y les ha ordenado que les dejen en paz. Para tener buena salud mental hay que ser clara en tus designios. Ningún ideólogo o ideóloga de la femineidad y de lo políticamente correcto debería excederse pontificando.
RoRo tiene 22 años, aspecto de tener 15, y crea contenidos para las redes. Se dedica a cocinar para su novio y sus vídeos siempre comienzan diciendo que hoy Pablo le ha pedido que cocine blablablá o que a Pablo le apetece comer blablablá. Y ella se pone manos a la obra. En realidad, hace vídeos de cocina (como tantos otros) con un fin romántico y, por supuesto, la machacan y critican por emular a las esposas tradicionales y sumisas del siglo pasado. Juzgar a los demás, deporte nacional. Hoy, RoRo tiene un mánager que la ayuda a gestionar su negocio y estrategia de marketing. No creo que un chico cocinando para su novia recibiera tantas críticas (ni que necesitara un mánager) y tampoco tengo claro que nuestro foco deba estar en juzgarla a ella y no en cuestionarnos la baja calidad de los contenidos que, en general, vemos.
Clara (nombre ficticio) vive con un hombre que la maltrata psicológicamente, que le prohíbe salir con amigos y que le pide dinero para sus caprichos. Ha perdido su trabajo, está deprimida y se siente incapaz de dar un golpe de timón. Una supuesta amiga suya me cuenta que siempre ha sido débil y que es normal acabar con un impresentable. En vez de apoyarla, opina que tiene lo que se merece. Y Clara se siente culpable, obligada a justificarse y a dar explicaciones de sus miserias. Cornuda y apaleada.
A Kamala Harris la han llamado “Kamalasutra” y la han acusado de prestar favores sexuales para llegar donde ha llegado. Han dicho que nació hombre y que es mujer trans, como también dijeron de Michelle Obama, Brigitte Macron o Begoña Gómez. Han dicho que es una soltera amante de los gatos, miserable, sin hijos y, por tanto, incapaz de tener un interés directo en el futuro de Estados Unidos. Quién da más.
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Hombres y mujeres despellejan y critican por igual, pero siempre somos nosotras quienes debemos invertir más tiempo y energía en dar explicaciones. Un hartazgo.
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Source: Informacion
Dolores Johnson is a voice of reason at “Social Bites”. As an opinion writer, she provides her readers with insightful commentary on the most pressing issues of the day. With her well-informed perspectives and clear writing style, Dolores helps readers navigate the complex world of news and politics, providing a balanced and thoughtful view on the most important topics of the moment.