Dos fueron las iniciativas en defensa de la continuidad del grado de Medicina en la UA que se debatieron, y aprobaron, este jueves por el Pleno de Alicante. Una, la que promovió el PP, criticaba la gestión del Botànic; la otra, impulsada por el bloque progresista, apuntaba a las maniobras de Mazón. Ambas salieron adelante gracias al apoyo de Vox.
Sin embargo, el Ayuntamiento de Alicante decidió informar exclusivamente sobre una de ellas (la del PP, claro está), silenciando la otra (la firmada por la izquierda). Y lo hizo desde el Gabinete de Prensa, en una nota enviada bajo el epígrafe «Ayuntamiento de Alicante». Un hecho, repetido, que evidencia cómo el gobierno de Barcala utiliza sin rubor las instituciones con fines partidistas, para beneficio propio.
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De no ser así, el Ayuntamiento hubiera mandado un texto con alusiones a las dos iniciativas (ambas aprobadas) o, al menos, los de Barcala habrían distribuido el comunicado desde la cuenta del grupo municipal del PP o la del partido. Ahí está la diferencia entre el respeto institucional o el uso de las administraciones.
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