El patrón de una patera interceptada en Alicante el pasado mes de abril se ha declarado culpable y ha aceptado una pena de dos años y medio de prisión durante el juicio celebrado este martes en la Audiencia Provincial. La Fiscalía y la defensa han cerrado una conformidad antes de la vista oral en la que se han reducido de ocho a dos años y medio la pena solicitada.
Los tripulantes de la embarcación, nueve hombres y una mujer, habían pagado entre 2.000 y 9.000 euros para el trayecto desde Argelia a la provincia. La embarcación, de cinco metros de eslora, realizó el trayecto sin luces, ni equipo de seguridad. El riesgo al que se expuso a los tripulantes era uno de los aspectos valorados por el Ministerio Público al presentar la acusación, por lo que el hecho de que finalmente se completará el viaje sin lamentar daños personales ha sido otro de los elementos valorados para la rebaja de penas.
En un momento del trayecto, uno de los ocupantes del barco pidió al acusado que bajara la velocidad porque su mujer estaba enferma, a lo que éste respondió parando el motor y amenazando con quemar la patera con todos dentro. Un incidente que había permitido identificarle como el patrón de la embarcación.
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El procesado, que estaba defendido por el abogado José Soler, ha aceptado una pena de dos años y un día por un delito de favorecimiento de la inmigración ilegal, así como otra pena de seis meses de prisión por el delito de amenazas se ha pedido una orden de alejamiento para que el procesado no pueda acercarse a ninguno de los tripulantes del viaje. El acusado estaba en prisión preventiva desde su detención a raíz de la llegada de la patera. Con el acuerdo alcanzado tendrá que cumplir la pena de prisión en España y se descarta la expulsión del territorio nacional.