“Sois los del kebab?, ¿qué hacéis que no habéis hecho las maletas y os habéis ido a vuestro puto país a tomar por culo?, ¿qué hacéis pegándole a un chaval por maricón?, a que voy y le pego fuego al local“. Son los comentarios que reciben los dueños del establecimiento del centro de Murcia donde se vivió un altercado que ha trascendido como una agresión homófoba a Víctor Sáez, concejal socialista del Ayuntamiento de Lorquí.
Los hechos ocurrieron en el Kebab 24 horas de La Merced, ubicado en pleno centro de la ciudad, en la esquina de Calle Trinidad con Calle Obispo Frutos. El edil difundió la noticia a través de sus redes sociales y aseguró que el dueño y los camareros del lugar le agredieron físicamente al grito de “maricón de mierda”, “te mato, maricón, te voy a matar, te voy a cortar el cuello”. El concejal contó que acudió a una ambulancia que le llevó a urgencias, donde le hicieron radiografías, en pie, mano y examinaron su cabeza.
Por su parte, la propietaria del local se personó en la comisaría este jueves por la tarde para interponer una denuncia contra el edil socialista. Ella y su familia han estado recibiendo llamadas amenazantes desde que se difundió el suceso y temen que se tome represalias contra ellos.
Además, el abogado de la familia, Manuel Chacón, ha confirmado a esta Redacción que los propietarios del kebab no tenían conocimiento de la orientación sexual del concejal y que el incidente comenzó por la actitud incívica de este y su amigo.
Denuncia
En la denuncia, a la que ha tenido acceso La Opinión, se detalla que dos hombres vestidos de huertano, el concejal y un amigo suyo, quisieron usar los baños del local y, ante la negativa de los trabajadores, la situación se puso violenta.
En el documento policial se detalla que los clientes lanzaron un taburete que bloqueaba el acceso a los servicios y comenzaron a golpear una vidriera mientras pedían la hoja de reclamaciones y gritaban “moros de mierda”.
El marido de la propietaria les dijo que, debido a sus comentarios, no les daría la hoja de reclamaciones, pero finalmente se la dio, pues es un derecho reconocido para los consumidores. Uno de los chicos, que llevaba un chaleco de huertano rojo, rompió una de las vidrieras y el otro, que portaba chaleco verde, intentó tirar otra, pero uno de los trabajadores del local lo tiró al suelo y este empleado terminó por acudir al hospital Reina Sofía por las lesiones sufridas.
En ese momento, la propietaria cogió un taburete y “se puso delante de la vitrina en posición de defensa”, detalla la demanda, que añade que
Tras el forcejeo, otros clientes del local instaron a los dos hombres a irse del local, quienes se fueron diciendo a la gente en la calle que era un mal local y que los dueños son homófobos.
Un amigo del trabajador que participó en el forcejeo llamó a la Policía. Una vez en el lugar, los agentes comprobaron los daños causados en el local, en concreto, en una vidriera y la puerta de entrada.
Además, en la denuncia queda recogido que los dueños del establecimiento han recibido varias llamadas preguntando a qué hora abrían y cerraban, pero no se pide más información, por lo que temen que estén pensando en tomar alguna represalia contra ellos.
A la hora de realizar la denuncia, los propietarios del local adjuntaron vídeos de las llamadas amenazantes, así como imágenes de mensajes de WhatsApp que han recibido tras el suceso, como uno de una supuesta ‘María’ que les dice: “Bonjour, soy gay y te quiero follar el culo, sé que te gusta”.
Source: Informacion
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