El precio de la vivienda sigue aumentando en nuestro país y estamos ante un mercado en constante cambio. Desde hace un tiempo las casas okupadas ocupan un segmento peculiar dentro del mercado que muchos tienen en cuenta a la hora de hacer una inversión debido a su bajo precio.
Una vivienda okupada es aquella que está siendo habitada sin el consentimiento del propietario. Esto puede darse en muchas situaciones: desde pisos vacíos en manos de bancos o fondos, hasta propiedades heredadas o abandonadas durante años. En ocasiones, los okupas son personas en situación vulnerable; en otras, se trata de ocupaciones organizadas que buscan lucrarse o negociar compensaciones para desalojar.
Riesgos de comprar una vivienda okupada
La principal razón por la que estas propiedades tienen un precio muy por debajo del valor de mercado es el riesgo legal y económico que implican. Debes tener en cuenta que si compras una casa okupada no tendrás su posesión inmediata, es decir, no puedes entrar a vivir ni reformar la vivienda hasta que esté vacía legalmente.
En este sentido, debes conocer que los trámites judiciales son lentos, ya que hay que iniciar un proceso judicial que puede tardar muchos meses y que el estado de conservación de estas casas suele ser muy deficiente. También son más económicos porque todas estas trabajas legales y riesgos hacen que haya pocos compradores.
Entre las ventajas que tiene adquirir esta vivienda, como hemos comentado antes, está que el precio está muy por debajo del mercado y, por lo tanto, se pueden revalorizar mucho hasta alcanzar el precio del mercado.
Este tipo de operaciones son atractivas para quienes no tienen prisa, saben gestionar procesos legales y tienen otras fuentes de ingreso mientras se resuelve la situación de la propiedad. En algunos casos, los compradores logran acuerdos económicos con los okupas para acelerar el desalojo, evitando procesos judiciales largos. Aunque esto también implica costes, puede acortar plazos considerablemente.
Comprar una vivienda en estas condiciones no es para todo el mundo. Antes de lanzarse, es imprescindible contar con asesoramiento legal especializado, un estudio detallado del inmueble y su situación registral, capacidad económica para soportar la espera sin ingresos de esa propiedad y conocimiento del entorno y del valor real de mercado.
Las casas okupadas más baratas de Alicante
La casa okupada más barata es un chalet pareado en Callosa de Segura de 38 metros cuadrados “perfecto para parejas” y cuesta 13.200 euros. En Alicante y por 20.000 euros hay dos pisos a la venta en el barrio XXIII, ambos de tres habitaciones.
En el centro de Xixona, en la calle del Fossar, hay una vivienda de 60 metros cuadrados con cuatro dormitorios y un baño que se vende por 20.700 euros
Si volvemos a Callosa de Segura también se vende otra casa okupada de 108 metros cuadrados y tres habitaciones ubicado en una planta baja. La casa está cerca del colegio público Primo de Rivera y cuesta 22.500 euros.
Por último, en Elche se vende un piso en la calle Arturo Salvetti Pardo de 76 metros cuadrados de tres habitaciones y vale 22.900 euros.
Source: Informacion
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