Dividend yields of ten Ibex 35 companies outpace inflation by three times

La inflación se modera en España. El ‘efecto base’ respecto al año anterior y la caída de los precios de los alimentos y los carburantes han rebajado el Índice de Precios de Consumo (IPC) adelantado de agosto hasta el 2,2%, según el Instituto Nacional de Estadística (INE). Es la tasa más baja de los últimos 14 meses: en junio de 2023 fue del 1,9% y desde entonces no había bajado por debajo del 2,3%. 

El aumento del coste de la vida hace que la liquidez pierda valor y los ahorradores tengan que buscar refugio en activos financieros como la bolsa o la renta fija. En el Ibex 35 hay compañías que buscan atraer a los inversores a través del pago de dividendos elevados, lo que genera accionistas fieles y con visión de largo plazo. El selectivo español cuenta en este momento con diez compañías que multiplican por tres (6,6%) a la inflación de agosto.

Se trata de Unicaja, que presenta la rentabilidad por dividendo más elevada ahora mismo del índice bursátil nacional con un 9,65%; Caixabank con un 8,78%, Enagás con un 8,19%, Banco Sabadell un 8,19%, BBVA un 7,73%, Repsol un 7,68%, Logista un 7,38%, Telefónica un 7,21%, Mapfre un 7,21% y Bankinter un 6,65%. Llama la atención, además, porque de las diez compañías solo dos cotizan en negativo en lo que va de año, Enagás que cae un 0,84% y Repsol un 5%.

La rentabilidad por dividendo es un ratio financiero que relaciona, en porcentaje, la retribución que hace una compañía a sus accionistas en el último año y el precio de la acción, por lo que si esta cae el ratio aumenta. Sin embargo, se da la paradoja que las tres compañías que más suben este año en el Ibex 35 aparecen entre las compañías que pagan un dividendo más generoso, Banco Sabadell que se anota una revalorización anual del 68,9%, Caixabank del 54,9% y Bankinter del 41%.

La bolsa española, reina del dividendo

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“Si algo tiene la Bolsa española es que es de las pocas del mundo que es una ‘joya’ para los cazadores de dividendo. Nuestro mercado, junto a otros como Australia, es conocido en la industria financiera por los pagos con los que retribuye a sus accionistas”, apuntan los analistas de Mapfre.

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El pasado año, la remuneración al accionista en forma de dividendos aumentó un 19% respecto al año anterior hasta los 30.087 millones en 237 pagos, de los cuales casi 3.500 millones en 10 pagos han sido en forma de acciones (scrip). La rentabilidad media histórica por dividendo de los últimos 35 años es del 4%, la más elevada entre sus comparables, según datos Bolsas y Mercados Españoles (BME). Para este año, la previsión de los analistas apunta a que la bolsa española alcanzará el récord en el pago de dividendos y superará las cifras de 2014, cuando las empresas abonaron 43.270 millones.

Las letras del Tesoro, otro complemento

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Más allá de los dividendos, el rendimiento de las letras del Tesoro superan también a las cifras de inflación, lo que permite a los ahorradores más conservadores proteger su patrimonio sin la volatilidad de las bolsas. Las letras a tres, seis y nueve meses cuentan con una rentabilidad superior al 3,1%. La mayoría de bancos españoles siguen, por su parte, sin remunerar el ahorro, aunque en los últimos meses han lanzado campañas comerciales para captar patrimonio a través de sus filiales digitales.

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Desde Asufin, de hecho, el pasado viernes denunciaron la irrupción en el mercado del “depósito bonificado”. “Esta práctica salta de las hipotecas al depósito a plazo fijo, con el producto que anuncia CaixaBank: al 1% fijo a 12 meses, cuya mejora se vincula a la contratación de productos adicionales como alarmas o seguros, que suelen ser más caros y con peores coberturas. Por ejemplo, para compensar el 0,25% de interés por el coste básico anual de una alarma del hogar (960 euros) habría que mantener depositado 360.000 euros. La remuneración de base, del 1%, resulta irrisoria y no se compadece con la media en los países de nuestro entorno”, añaden.

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