Días de guerra psicológica y diplomacia ferviente en Oriente Próximo. Altos cargos de Estados Unidos han informado a la televisión qatarí Al Jazeera que creen que la respuesta de Irán al ataque israelí sobre su consulado en Damasco será inminente y directa, lo que podría dar pie a una peligrosa escalada de los acontecimientos en una región que lleva medio año en llamas a raíz de la guerra en Gaza. Según publica ‘The Guardian’, esos mismos funcionarios aseguraron que Washington no solo estaría dispuesto a ayudar a Israel a defenderse sino que podría intervenir en el previsible respuesta posterior del Estado judío. Así lo sugirió también la víspera el presidente Joe Biden, al afirmar que hará “todo” lo que pueda para proteger a Israel. De momento, ha enviado a Tel Aviv al jefe del Comando Central del Pentágono para coordinar con su aliado los próximos movimientos.
Israel e Irán llevan muchos años con la daga entre los dientes, pero en gran medida han evitado la confrontación directa. El primero ha sido acusado de asesinar a científicos nucleares iraníes en operaciones encubiertas en territorio persa, amén de otros ataques híbridos, pero, generalmente, cuando ha matado a militares iraníes lo ha hecho en terceros países. Del otro lado, no hay constancia en los últimos años de que Teherán haya matado a ningún alto cargo israelí, pero arma y financia a los enemigos más activos de Israel, como Hamás e Hizbulá, responsables de la muerte de miles de israelíes. Pero esta vez las cosas son más complicadas. No solo fue eliminado el comandante al frente de las operaciones iraníes en el Levante, el general Mohammad Reza Zahedi, sino que el ataque golpeó la legación diplomática, un hecho del que no hay apenas precedentes en muchas décadas.
Esta misma semana el líder supremo de Irán, el ayatolá Ali Jamenei, afirmó que el misil sobre la legación diplomática equivale a un ataque sobre territorio iraní y afirmó que Israel “deber ser castigado”. Nadie descarta que esta vez pueda tratarse de un ataque directo, lo que hizo que a principios de mes la población israelí reaccionara con histeria. Muchos se lanzaron a hacer acopio de comida, a sacar dinero de los cajeros o incluso durmieron vestidos por si tenían que salir por piernas.
Contactos con Irán
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Nadie se lo está tomando a la ligera. La indiferencia diplomática que durante muchos meses generó la salvaje respuesta israelí al brutal ataque de Hamás en su territorio ha dado paso ahora a febriles esfuerzos para tratar de convencer a Irán para que mantenga la contención. Muchos de los aliados regionales de EEUU han mantenido conversaciones con el canciller iraní, Hossein Amir-Abdollahian, quien esta semana viajó también a Siria para reunirse con sus aliados y a Omán, que suele ejercer de mediador entre ambos mundos. También la cancillería alemana ha tenido contactos con Teherán. Y su aerolínea, Lufthansa, ha suspendido por el momento todos los vuelos a Irán.
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[–>En medio de tanto ruido de sables, Israel ha puesto en máxima alerta a sus fuerzas. Ha suspendido los permisos de sus unidades de combate e incrementado la seguridad de sus cielos ante la posibilidad de un ataque con misiles o drones. La histeria ciudadana en gran medida se ha calmado, pero la prensa hebrea publicó la semana pasada que el Ejército se plantea abrir los refugios antiaéreos en Tel Aviv. Y entre tanto, sus dirigentes juegan también a la guerra psicológica. “Quienquiera que nos haga daño, responderemos haciéndole daño”, ha dicho este jueves el primer ministro, Binyamín Netanyahu. Más explícito fue su ministro de Exteriores. “Si Irán nos ataca desde su territorio, Israel responderá atacando Irán”, escribió en las redes Israel Katz.
Source: Informacion
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